Como atinadamente dice un amigo portugués en un comentario al video de abajo: a humanidade agradece. Madredeus es uno de esos grupos que se da muy de vez en cuando. La voz de Teresa Salgueiro y el gran talento del resto del grupo hace que escucharlos sea una experiencia que se queda en corazón como ecos de guitarra. Hay otros muy buenos exponentes del fado pero para mí, no fácilmente llegan tan hondo como Madredeus, quienes además acompañan la experiencia de escucharlos con una sencillez y humildad que no se ve a diario.
Tiendo a ser mucho de canciones felices y ésta es por supuesto mi favorita entre ellas. Eso sin contar que coincide mucho con mi forma de vivir. Por favor, si alguien no ha visto Rent, rente (valga el juego de palabras) la película. O lánzese a Broadway a verla, si puede (y si todavía está en cartelera, no se). Es una experiencia que se queda mucho rato en el corazón. Y si además es usted bailarín, cantante o artista en general y/o es seropositivo o tiene en su vida a alguen que lo sea, sus lágrimas no serán inmunes a Rent. Tal vez experimente algún cambio y decida vivir un día a la vez.
¿Por qué? Porque soy folclórico por naturaleza, porque quiero y porque me encantan las canciones felices, como ya he dicho. Es imposible no contagiarse con el ritmo de este son. Además me encanta su ironía, por aquello de "que lo puede zapatear tanto el chino como el gringo" cuando es uno de los sones más difíciles.
Hace unos días Angelito Mariconcha decía que la Tañón es la mejor mujer con la que le ha tocado trabajar. Yo creo también que esa mujer tiene un angel del tamaño de Puerto Rico, pero además, hay dos de las canciones que interpreta que calan muy hondo en mi. Es por eso que aquí hay un empate entre En tí y Flaca o gordita. "Que mis últimas palabras sean que en el cielo te voy a esperar". A ver, que te digan eso? Yo lloro.


