7.17.2009

Balada por encargo

Como no hay fecha que no se llegue ni plazo que no se cumpla, héme aquí, casi a medianoche, en un súbito arranque de inspiración (según yo) terminando lo que comencé hace días: un pequeño poema para Alan, como premio (si es que ideas mías pueden significar un premio) por haber sido el visitante número mil de este mar de palabras.

Un abrazo, Alancito (está escrito como si tú estuvieras narrando).


CARCAJADA

Escondido,
en silencio
sentía que la oscuridad me devoraba.
Era frágil
y mordía mi soledad
pero sabía que alguna vez tendría que terminar.

Cuesta tanto
darse cuenta,
cuando crees que sólo hay mal en tus hermanos.
Cuando crees que no,
que nadie más comparte tu canción.

Y el espejo
reflejaba
unas lágrimas lavando mi sonrisa
no podía entender
si era crueldad
o sólo un juego más.

Pero entonces
como magia,
pude ver mis ojos en otra mirada.
Pude verme a mi,
saber que sí,
que todo puedo hacer.

Y mi risa
ya no para.
Encontré mil dones que tenía escondidos
y me construí
el sueño en que me gusta amanecer.

Y agradezco
tantas cosas
tanta gente
y es mi risa lo que escucho alrededor.



Buenas noches a todos (o buenos días, como prefieran).

2 comentarios:

Noé dijo...

Lo increíble que se siente el saber que Doña Chole no es nuestra única compañía...Porque vaya que puede ser canija. Feliz finde!!!

P.D. Voy al D.F. el 8 de agosto, estarás ocupado??

Saludos dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.