Uno de esos momentos lo viví hace casi quince años, cuando mi mirada se cruzó con otra en el centro de esta ciudad. Y los caminos se cruzaron después de las miradas. Y lo que creía que sería mi vida no lo fué más. Y fué un encontrarse y un reconocerse. Y fué un amor de esos grandes, que de grandes pasan por todas sus formas, crean lazos, dan vida, crean familia. Y sigue siendo.
Como he dicho otras veces, en algunos casos compartir camino con algunos seres es un honor. Este es uno de esos casos en los que además de placer y honor, es una bendición. Vida y más vida compartida. Y mañana es su cumpleaños, así que que no me queda más que desearle más miradas, más parpadeos, más suspiros.
¡Felicidades Bocas!
Dice bien Amaury:
4 comentarios:
V.O.S... Siempre!!
Que fregon compartir. que mal pedo no hacerlo
Pues si, benditos amigos así como los cantó Amaury. Y como pocas veces en la vida tiene uno la fortuna, el gusto. Cumpleañeros cercanos, mira nada más. Felicitaciones dobles. Otra vez. Saludos
Felicidades al suertudo que sí se le consideró como amigo!!!!! :) Muchas felicidades.
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